Las casas de madera prefabricadas son tendencia, de eso no hay duda. Hace ya algunos años, podemos ver cómo este tipo de construcciones listas para ser habitadas ganan terreno gracias a sus múltiples ventajas. ¿Quieres saber por qué son tan elegidas? Entonces toma nota: en este artículo te contaremos de dónde provienen, cuáles son sus características principales y todos los secretos de las casas prefabricadas de madera.
Cuando se trata de pensar en la casa ideal, son muchos los factores que las personas suelen tienen en cuenta. Entre los más comunes, podemos encontrar: comodidad, diseño, dimensiones y materiales de construcción. Si analizamos las casas prefabricadas de madera bajo esta óptica, entonces nos daremos en cuenta de que todos esos aspectos están contemplados y que todos ellos están garantizados bajo una misma premisa: la accesibilidad. Si estás buscando el hogar que siempre has deseado, pero no quieres o no puedes realizar un proyecto desde cero, te interesará saber todo acerca de las casas prefabricadas de madera. ¿Estás listo para adentrarte en este maravilloso mundo?
Seguramente has escuchado hablar de ellas en todos lados, pero quizás no sepas qué implica que una casa sea prefabricada. Es muy simple: las casas prefabricadas son viviendas producidas a partir de piezas estandarizadas, que son ensambladas en fábrica y luego son enviadas a su lugar de emplazamiento en donde se realiza el montaje final. Gracias a los constantes avances tecnológicos, este tipo de construcciones se hacen más y más sofisticadas con el correr del tiempo, y se han convertido en una alternativa muy requerida en la actualidad por muchas personas alrededor del mundo.
También conocidas como casas modulares o industriales, las casas prefabricadas pueden estar realizadas de diversos materiales como el hormigón, concreto, metal y, el más utilizado, la madera. Las casas de madera prefabricadas se realizan comúnmente empleando madera tratada y se distinguen por su estética que remite a la naturaleza y su ambiente acogedor. Además, ofrecen ventajas para el entorno, al ser sustentables, y a la salud.
Para entender este fenómeno que arrasa alrededor de todo el mundo, es importante conocer de dónde provienen las casas de madera prefabricada. Concretamente, para hablar de su historia, tenemos que remontarnos a 1830, más precisamente a Inglaterra. En ese entonces, a aquellos que emprendían su camino hacia las colonias inglesas en Australia, se les proporcionaba ayuda mediante una suerte de kit de de construcción para que pudieran realizar su casa en aquel nuevo país.
Algunos años pasaron hasta que, en 1851, en el marco de la Exposición Universal de Londres, se registró la primera construcción “desmontable”: el Crystal Palace. Este edificio, diseñado con hierro fundido y cristal, se sitúa como el primer ejemplar de casa prefabricada móvil, y fue seguido por distintos proyectos similares que fueron extendiéndose en otros países. Y con la llegada del siglo XX, en particular con el desarrollo del sistema de producción en serie del fordismo, se posibilitó el aumento de diferentes técnicas que fueron aplicadas en el sector de la arquitectura y la construcción, que dieron lugar a la ploriferación de casas prefabricadas cada vez más sofisticadas.
Si bien existen sobrados ejemplos de casas prefabricadas icónicas, quizás haya que detenerse en uno de los antecedentes más relevantes en este sentido: las casas prefabricadas elegidas por catálogo y enviadas por correo de Sears. En 1908, la empresa estadounidense de tiendas departamentales lanzó al mercado la venta de viviendas modulares de los más diversos estilos y tamaños, utilizando sistemas de armazón «estilo globo» que no requerían el trabajo de un equipo de carpinteros cualificados, como ocurría con los métodos anteriores. Los armazones en forma de globo se construían con mayor rapidez y, por lo general, sólo necesitaban de poca mano de obra. Este sistema utilizaba madera precortada de tamaños mayoritariamente estándar. De este modo, las viviendas modulares se instalaron definitivamente y su expansión se dio de forma rápida y sostenida. Hoy en día, las casas prefabricadas se comercializan alrededor de todo el Planeta y ganan cada vez más adeptos.
Ahora que hemos visto cuál fue el recorrido de las casas prefabricadas, vamos a deternernos en el modelo más requerido: la casa de madera prefabricada. Esta variante es muy elegido gracias a que cuenta con numerosas propiedades y características que resultan ventajosas para todos los estilos de vida. El aislamiento térmico, la resistencia del material y la calidez que proporciona la madera son solo algunos de los principales beneficios de las casas de madera prefabricadas.
Ya sea que se trate de una residencia para habitar solo en temporadas cortas y vacaciones, o se trate de una casa para todo el año, las casas prefabricadas de madera, no solo por sus precios y modelos, resultan una opción más que interesante para considerar. ¿Quieres saber cuáles son sus principales ventajas? Conoce todos los motivos por los que, día a día, miles de personas las eligen para vivir:
Si comparamos la madera con otro tipo de materiales de construcción, encontraremos que la madera es el material aislante por excelencia, ya que retiene el calor y el frío y mantiene temperaturas constantes. Esto asegura un ahorro en las facturas de energía, hasta el punto de producir energía limpia que será devuelta a la red energética. Al mismo tiempo, siempre es recomendable realizar trabajos de aislamiento, sobre todo si se usará la vivienda en épocas frías o durante largos períodos de tiempo.
Además de ser un excelente aislante térmico, la madera también es un gran aislante acústico. Esto es así porque, al ser este un material poroso, absorbe una buena parte del sonido y evita que llegue al interior. Para aquellos que tienen mucha sensibilidad a los sonidos, esta es una gran característica.
La madera es un componente íntegramente natural, por lo que no resulta nociva para el entorno. A su vez, la madera se descompone con el tiempo, a diferencia de otros materiales de construcción hechos de compuestos sintéticos. Además, su proceso de fabricación utiliza mucha menos energía de los combustibles fósiles por unidad de volumen en comparación con el acero, el hormigón o el aluminio, lo que minimiza la cantidad de contaminantes que se generan durante el proceso. En muchos casos, la madera elegida para la construcción es certificada, lo que significa que proviene de bosques sustentables.
Por otro lado, como hemos mencionado anteriormente, al requerir menos calefacción para mantener la temperatura dentro de la casa de madera, también ayuda a reducir el uso de energía y la huella de carbono.
Debido a la variedad de maderas que se pueden encontrar, es posible crear un estilo de interiorismo diferente en función de las distintas necesidades de sus habitantes. Además, la madera es compatible con muchos otros materiales, lo que permite combinar los distintos elementos sin perder de vista lo estético.
Otro factor que vale la pena mencionar es que, en lo que respecta a la apariencia y la durabilidad, la madera no se oxida con el tiempo. Esto permite mantener un aspecto cuidado durante más tiempo y no es necesario gastar mucho dinero en el mantenimiento.
Si nos centramos en las casas de madera, precios y modelos, veremos que la madera es sustancialmente más barata que otras opciones como las de hormigón y ladrillo, y son muy fáciles de construir (lo que las hace más económicas). Al estar fabricadas con materiales naturales que son biodegradables, reciclables y se consideran ecológicos, las casas de madera son rápidas y fáciles de construir, económicas y energéticamente eficientes.
Los tiempos de realización de las casas prefabricadas son realmente muy veloces, ya que los procesos de fabricación son estandarizados. Esto quiere decir que los métodos son industrializados y, como resultado, mñas eficientes y rápidos.
Con las nuevas tecnologías y formas de tratamiento, la madera ha adquirido mejores propiedades y funcionalidades: resistencia a la humedad, al fuego, al agrietamiento, a los hongos y a los insectos. Con un adecuado mantenimiento y el uso adecuado, la madera puede tener una vida útil desde 90 años hasta cientos de años.
Además, las tecnologías avanzadas en la producción de madera han permitido dejar de lado muchos procesos negativos que tenían lugar en el pasado como la torsión, agrietamiento, descomposición, decoloración del material.
Una casa prefabricada de madera es sinónimo de una vida más saludable. ¿Por qué? Porque este tipo de viviendas, generalmente emplazadas en la naturaleza, invitan a una conexión con el espacio exterior y, por ende, a momentos de relajación lejos del estrés del día a día.
Como has podido ver, las ventajas de las casas de madera prefabricadas son muchas y de lo más variadas. Si sueñas con tener una casa propia y cuentas con un presupuesto limitado, no lo dudes. En poco tiempo podrás tener una vivienda única, que te permitirá tener un lugar en donde relajarte y disfrutar rodeado de naturaleza durante todo el año, tanto en soledad como con tus seres queridos.